domingo, 31 de enero de 2010

Lo que nos deja enero. Parte 2

Las elecciones en Chile
Entre las cosas malas que sucedieron en enero no puedo dejar de señalar el resultado final de las elecciones en Chile.
El resultado es malo desde donde se lo mire.
Para el pueblo chileno significa un retroceso tanto ideológico como en sus futuros derechos cívicos y sociales y expectativas de cambio social.
Emir Sader, en el diario Pagina 12, días después de las elecciones escribía:
De tanto creerse un país de la OCDE, distanciado de América latina, el “tigre latinoamericano”, Chile hizo ganador a un Berlusconi. Ese es el molde de Sebastián Piñera, quien fue electo presidente de Chile posibilitando la vuelta de la derecha al gobierno. (Emir Sader, Pagina 12, 20 de enero de 2010).
Por otra parte y para quitarles tanta responsabilidad a los votantes chilenos hay que reconocer, como lo señala Atilio Borón, que no había gran diferencia entre el candidato de la concertación y el del pinochetismo.
Así Boron señala en Pagina 12 del 22 de enero que:
“Para la Concertación el triunfo de la derecha (en realidad, de su variante más virulenta: la pinochetista) en las elecciones presidenciales chilenas podría considerarse como un ejemplo más de una “crónica de una muerte anunciada”. La progresiva asimilación del legado ideológico de la dictadura militar por los principales cuadros de la alianza democristiana-socialista hizo que la diferenciación entre la Concertación y los herederos políticos del régimen militar, Renovación Nacional (su ala “moderada”, si es que un “pinochetismo moderado” puede ser otra cosa que un oxímoron) y la Unión Demócrata Independiente, sus batallones más cavernícolas, fuera desvaneciéndose hasta tornarse imperceptibles para el electorado. Fernando Henrique Cardoso gustaba repetirles a sus alumnos que “a la larga, los pueblos siempre van a preferir el original a la copia”. Y tenía razón. En este caso, el original era el pinochetismo y su heredero: Sebastián Piñera; la Concertación y su inverosímil candidato, la copia.”
E
sta situación no es nueva en absoluto, fue gestándose en los últimos veinte años y algo de chauvinismo excesivo en la propia intelectualidad chilena los lanzó a los brazos de la derecha.
Hace más de 20 años, en Esquel, había un grupo de jóvenes chilenos, cantores, estudiantes, todos progresistas, todos de izquierda. En esa época mantenían un discurso despreciativo sobre la evolución de la política en Argentina. Es justo decir que era la Argentina de Menem, pero de tanto aguantarlos una vez me harte y les pregunte:
¿quién gobierna en Chile? Pinochet dijeron,
¿la salud es gratuita? No, me dijeron,
¿la Educación Universitaria es gratuita? No, me contestaron.
Bueno, dije, eso explica porque ustedes están aquí y no en Chile.
Como muchos saben, no he pasado casi nunca el casting de la simpatía y menos cuando me hinchan las pelotas de que afuera se está mejor.
Quería traer a cuento esta pequeña historia del “sapo cancionero chileno” para que podamos entender lo que dicen Sader y Borón.
Pero además los resultados son aún más malos para el resto de Latinoamérica, se suman al golpe en Honduras, se suman a los Alan Garcia, a los Uribe. Y, es probable, a ciertos aires de derecha que las clases medias argentinas transpiran hoy día y que anticipan tormentas para el campo nacional y popular. Duhalde, Lilita, Cobos, Macri, casi no hay nadie que los medios ensalcen que no represente el ideario de la derecha. Y como la izquierda vernácula en general juega el juego de “a cuanto peor mejor” pareciera que vamos en un trencito al infierno. Máxime si los K. no habilitan a la discusión a sectores con menos mañas que el PJ.
No obstante, y como siempre, la pelearemos.
Rusvi Tahan

sábado, 30 de enero de 2010

Lo que nos deja enero. Parte 1

La historia de Redrado
Ninguno de nosotros ha dejado de ver la telenovela del verano, donde el “Golden Boy” como le gusta llamarse, galancete de guita y de cuarta, Martin Redrado se transformó en la revelación de la pantalla chica.
Como estaba de vacaciones solo lo seguí por los diarios y no quise escribir hasta que el ultimo capitulo no me permitiera ver la estatura del actor.
Hace años que no veo un tipo tan ególatra. Ayer, y gracias a él, me entere que la economía no la maneja el Ministro y menos los K. Todo eso eran fabulas de Clarín. La economía de los últimos 6 años, las reservas, el dólar, la deuda externa, la estabilidad monetaria, etc. Etc. Son solo atribuibles a Martin Redrado. Si Alfonsin lo hubiera tenido jamás hubiera caído, y ni hablar de De la Rua, para que lo puso a Cavallo, lo hubiera puesto a Redrado y zafaba.
Bueno un delirio. Pero, un delirio evitable, hace 8 años Zlotoviazda pasó un video de autobombo de Redrado donde ya se veía que el flaco se creía Gardel. Y los K deben pagar el costo de haberlo designado.
Lo que hicieron los K es de manual de político negociador, lo hace Lula, lo hace Obama, etc. Etc. Lo que sucede es que los políticos en la Argentina no son como los brasileros o yanquis, los políticos en Argentina son de cuarta, pues ¿qué diferencia a Redrado de Prat Gay? nada, ¿a Redrado de Roque Fernández? nada. Uno u otro juegan de asesores para los políticos en acción, si no miren a Lilita exultante porque ahora Prat Gay le sirve de algo.
Pero lo verdaderamente preocupante es que los políticos juegan el juego destituyente para ellos mismos. El juego de la impolítica, de la desonfianza, el juego que permitirá la construcción de candidaturas clarinescas o del dueño del medio más vivo. ¿Manzano quizás?.
Me parece que el gobierno ya está en un lugar donde lo que diga caerá mal, pero a fuerza de ser sincero, a ese lugar llego manejando solo. Y se estacionó allí.
Puede cambiar, puede repetir el camino del segundo semestre del 2009. Pero para ello le hace falta algo más que agallas o decisión.
Le hace falta grandeza. Y puede que aún teniéndola, no tengan grandeza el Pino, el Chango, Lozano, Sabatella y nos vayamos al carajo. De la derecha no espero grandeza como verán.

Rusvi Tahan

lunes, 4 de enero de 2010

UN DÍA DE ROAD RADIO

En, un ya típico, viaje de enero a Baires desde Patagonia tuve la oportunidad de ir escuchando y viendo el paisaje de radios, anuncios y programas de TV, que están obligados a escuchar los argentinos que viven mas allá de Lujan.
Empecemos por la salida de Chubut, a pocos kilómetros de El Bolsón, una de las pocas radios que se escuchan es la 104.1 de Aidar- Vila -Manzano de Trelew. Esa radio, que tiene una repetidora en Lago Puelo, da cuenta del hermoso sol o calor en Playa Unión, dice la temperatura ( siempre de Trelew) y suena en Lago Puelo desde una radio local, sin un solo locutor o periodista local. Allí nos enteramos que el Gobernador Das Neves sigue enojado con Cristina K y piensa lanzar, en enero, su campaña presidencial en Mar del Plata. También que Chubut es una gran provincia, con un gran modelo, pero que el gobierno nacional, sin razón alguna, la discrimina en el reparto de fondos.
Unos kilómetros después, ¡Gracias a Dios¡ se pierde la señal, y cerca de Bariloche enganchamos Radio Nacional, el periodista esta entrevistando al Intendente Soria de General Roca, para más datos ex - director de la SIDE de Duhalde. Quién cuenta que la ciudad esta espléndida, que ha realizado obras por cientos de millones y que esta todo OK, salvo porque el gobierno provincial, radical , es un desastre. No aclara el origen de los fondos, uno supone que de la billetera o chequera K, diría Don Mario.
Pero allí empieza la parte bizarra de la entrevista, el periodista le pregunta por las candidaturas, empieza por la de Duahalde, Soria dice que es un gran piloto de tormentas, que el país le debe el rescate de la debacle de la Alianza y De La Rua. Sigue con Menem, allí desbarranca, dice: tenía un proyecto estratégico de país ( SIC) , claridad para insertarse internacionalmente y el rol que tenía el país ante los nuevos desafíos, y el contexto mundial ( en una palabra: vivan las relaciones carnales). Pero…., y a manera de fuerte critica, el problema de Menem era su afección por las chichis ( SIC) y la farándula. O sea: Menem era un genio, pero era fiestero. Nada que decir de la privatización de todo, de la corrupción , de ….etc.etc. para que seguir. Solo lo malo era ser amigo de las chicas de TV,gatos, lo abra visto con Albinoni seguro.
Es decir Soria es un ejemplo de lo sorete que siguen siendo los PJ más recalcitrantes.
De K no dijo una palabra, infiero que no lo quiere, pero como diría Sabina, Soria es una mulata de bandera, no quieren el amor sino la billetera.
Perdimos toda señal de radio en la meseta neuquina, así que allí llegue a Neuquen y mi hija comento un cartel de Daddy Yanquee, dijo: “miren estuvo en Neuquén”. Yo perdido como siempre, pregunte si era un nuevo personaje de Capuzzotto, el nombre era cantado. No¡¡¡ me dijeron a coro mis tres acompañantes, “sos un burro musical, ¿nunca escuchaste un tema de Daddy”?. No me acuerdo, conteste.Papa, es el de “gasolina” me espetaron.
Bueno ya en La Pampa paramos a descansar y en la cena estaba , ¿adivinen quien?. Si Tinnelli, que iba a realizar un especial solidario de fin de año. La milanesa me cayó para el orto, me tome un digestivo y me fui a dormir.
A la mañana siguiente la mejor radio que se enganchaba en la ruta 5 era Continental, estaba Victor Hugo ( zafe de Magdalena por unos minutos).
Un programa bien hecho, irónico a veces, allí me entere de que habían sobreseído a los K. por enriquecimiento ilícito. Con cortina de fondo de “ devolvé la bolsa”. Acá quiero señalar algo del programa, las criticas, el encuadre del programa, son excelentes, las cortinas de fondo en cambio señalan siempre la imagen negativa de la situación, y si nos guiamos por lo que seguramente le quedara al oyente, si hablo de guita el “devolvé la bolsa” me remite a choreo. Esto es igual en cada tema, existe un enfoque cómico prejuzgante de la situación.
Cuando paré en 9 de julio nos comieron los mosquitos, así que subimos al auto y seguimos. En ese tramo ( y los 300 km anteriores) comprobé que, pese a mis denuncias de hace ya tres años consecutivos, me seguían asaltando unos tipos que cada 200 km. interponían una barrera y me cobrababan $ 2,10 por una ruta igualita a la que yo transite desde mis 10 años ( y tengo más de 50), peor en verdad, porque no tenia el pasto de la banquina cortado, así que, presumo, si pinchaba una goma me inmolaría ante los mosquitos de la banquina.
Allí recordé nuevamente a Soria y a Menem.
Rusvi Tahan