Mano de obra
desocupada
Hace ya dos décadas el Ministro del Interior de Alfonsín, de
apellido Troccoli, ante una seguidilla de eventos con tufillo de “servicios”,
sostuvo que era la mano de obra desocupada de las Fuerzas de Seguridad, dando a
entender que la banda de asesinos y ladrones que se habían cebado con los
argentinos entre el 76 y el 83, como no tenía ya ingresos tan fáciles, ni
estaba protegida por la Odessa local de los milicos poderosos, se había transformado
en un número impreciso de simples bandas delincuenciales. Recuerdo, a simple
memoria, la de Anibal Gordon para dar un nombre.
En los últimos tiempos y pensando que esos grupos ya deben
estar frisando los 65 o 70 años de edad, las bandas se han reestructurado
alrededor de ejes narcos o parapoliciales, separados o todos juntos, esto muy probablemente.
Pero a estos se han sumado una nueva mano de obra desocupada
que, ya sea a través de clubes de futbol o de sindicatos, está dispuesta a
actuar para el que les pague. Y al igual que cuando crean o sobornan a ONGs
para que digan lo que necesitan que digan, las Multinacionales, digamos sus
operadores de RRPP, contratan a estos grupos violentos para pegarle, entre
otros, a los que, haciendo uso de sus derechos civiles luchan por el medio
ambiente. Ayer en Río Cuarto, Córdoba, una patota de la
UOCRA, para los que son enemigos de las siglas aclaro: Unión Obrera de la
Construcción, atacó a los ambientalistas que impedían el acceso a la planta de
Monsanto.
Que los muchachos de la UOCRA son una nueva versión,
tristemente neoliberal y real, de la Mano de Obra desocupada lo saben acá en
Chubut Das Neves, Sastre, Di Pierro etc. O la han sufrido o la han comprado
para que empioje la cosa.
No obstante, y sabiendo que con una buena investigación y
sin complicidades se puede rápidamente esclarecer el origen de las compras de
palos, quiero detenerme ahora en una mayor complicidad, la del Grupo Clarín, complicidad
nacida al calor de la mega muestra anual del Grupo en el sector agropecuario.
Anoche en el noticiero del Prime Time, con la mirada atenta del inefable
Biasatti y la ex investigadora seria, pasaron la noticia, mostraron a algunos
ambientalistas golpeados, explicaron que el Intendente de Río Cuarto había resuelto,
escuchando a sus vecinos digo yo, ellos no, impedir la ampliación de la planta
de Monsanto. De pronto pusieron al aire a…..¿a que no adivinan?, al
representante de Monsanto que explicaba que era un país libre, que la empresa era
buena y que no se le permitía la circulación para entrar a la fabrica. Ustedes
y yo, sin pensar en la generosa billetera de Monsanto, esperaban que apareciera
el Sr. Intendente dando las razones de su actitutd. ¡Nones!.
Termina el buen señor de corbata y traje impecable y Biasatti mirando a la Santillán con cara de
nada pasa a preguntarse ¿por qué los de la Uocra estaban tan enojados?, ¿que
razones tenían?, o a hablar de inseguridad en la Argentina o en Cordoba. Miren
que había tela.
No, lectores ilusos, Biasatti mira a un costado, y pasan a….
noticias deportivas.
Billetera mata galan.
Rusvi Tahan