Los hechos
Hasta donde se sabe el día 26 de setiembre en Iguala, estado
de Guerrero, un micro con estudiantes de magisterio rural fue interceptado
por la policía local, el chofer apareció asesinado, junto a tres estudiantes en
ese mismo sitio y de resto 43 en total no
se tuvo más noticias.
El conflicto con los estudiantes del magisterio rural se arrastra desde hace muchos años, cada diciembre los estudiantes van a la
Capital del Estado de Guerrero para
solicitar el cumplimiento de un pliego petitorio, que, entre otras cosas,
demanda la reparación de las instalaciones del plantel, el aumento a los
recursos para su sustento y la garantía de plazas en el sector público de la
educación para el 100% de sus egresados
El 12 de diciembre de
2012 los estudiantes cortaron la ruta ,
la policía reprimió y hubo al menos dos muertes, como sucede siempre los
estudiantes dicen que la policía los ataco y la policía dice que los
estudiantes incendiaron una estación de servicio.
El episodio del 26 de setiembre se inscribe en los
preparativos de la marcha anual de los estudiantes de México al Distrito
Federal para conmemorar la masacre de Tlatelolco de 1968, episodio que por su
terrible desenlace incitó a una permanente y más activa actitud crítica y
opositora de la sociedad civil, principalmente en las universidades públicas contra
el gobierno federal.
Lateralidades conducentes
Hasta aquí una pobre puesta en situación a los efectos de
ingresar al nudo de mi nota. En los últimos dos meses he participado de tres
encuentros internacionales. En la primer quincena de octubre estuve n la
asamblea bianual de la Sociedad Latinoamericana y Caribeña de Historia
Ambiental ( SOLCHA). El encuentro se realiza al final de tres jornadas donde se
presentan los avances en el campo, básicamente
una mirada a la historia de la conflictiva relación hombre – naturaleza en
nuestro planeta.
En la asamblea bianual un grupo de profesores y estudiantes
mexicanos solicitaron que la asamblea de la SOLCHA saque una declaración de
repudio por los hechos de Ayotzinapa.
Para sorpresa de muchos la presidenta de la asamblea se
negó, aduciendo que no era ni el ámbito ni correspondía colgar eso en la página
de la SOLCHA.
Quiero detenerme aquí, la historia ambiental tiene en su capítulo
mexicano toda una fuente de aprendizajes, allí hubo por parte de los pueblos
americanos problemas por desforestación y sobreexplotación de la tierra, hubo a
la llegada de los españoles la primera
epidemia de viruela que despobló el mundo mexica y le permitió a Cortez vencer,
epidemia que luego avanzó incontenible sobre el resto de América y mato a todos
a su paso. También en México los españoles desembarcaron sus caballos, ovejas,
vacas que pisaron y destruyeron el histórico modo de producción centroamericano
desertificando todo a su paso, finalmente es allí donde se inicia lo que sería
la historia del extractivismo minero, sacando la plata y el oro con que Europa
edifico con sangre americana y negra su actual poderío.
México también ha sido el centro de las revoluciones por la tierra,
la reforma agraria contra las haciendas. Es decir la asamblea de la SOLCHA era
un lugar indicado para analizar este conflicto donde se mezcla la ruralidad,
los narcos, los yanquies y el poder de los ricos mexicanos. Esa zona se aproxima
a ser forzada a un nuevo monocultivo : el de la amapola que conduce a la heroína.
Resumo, mi amigo José María Mendés levantó la mano y cuestionó a la presidenta,
esta se mantuvo cerrada, quien se creía este tipejo habrá pensado, pero allí se
paró un historiador brasileño , José Padua y con todo su prestigio y mucha
tranquilidad fundamentó que este acontecimiento era muy significativo y que la
SOLCHA no podía estar callada. Total, ganamos la votación, si ¡hubo votación!,
por 32 a 20.
Dos semanas después participo del primer Congreso
latinoamericano de conflictos ambientales
COLCA, allí son todos revolucionarios, anticapitalistas, antisojeros,
antiextractivistas. Pero ¿saben que? se
negaron a solidarizarse, con argumentos parecidos a los de la presidenta de la
SOLCHA. En un ambiente donde se puteo a todo lo que sonaba extractivo, que hubiese
votado en contra de pasteras, mineras y sojeras, no se votó por la vida de 43
estudiantes que viven en un claro conflicto socio ambiental producido por el
imperio norteamericano al demandar droga para su consumo.
El organizador, el Ingeniero Pengue, que nos había aburrido con una disertación llena
de frases comunes y diapositivas con dibujitos fue el principal argumentador,
temiendo seguro que los auspiciantes vieran con desagrado la “politización” de
este evento político. Un sinsentido por partida doble, primero porque es una
obligación moral denunciar el origen de este conflicto que es socio ambiental y
en segundo lugar porque como argentino debería haber actuado con un poquitito
más de memoria.
Por suerte en mi último encuentro, de Ecología Política, su
organizador otro argentino, el Dr. Hector Alimonda ni preguntó ni esperó, en la
apertura leyó una declaración de la CLACSO en favor de que aparezcan con vida
los 43 estudiantes, evitándonos el bochorno de tener que pedir algo que es una
obligación.
Reflexión final: los ámbitos
académicos de corte progresista esconden muchísimas contradicciones, olvidos y
omisiones. Egos insustanciales. Por eso cuesta tanto avanzar.
Por eso con más fuerza debemos gritar como latinoamericanos
¡Nunca Mas! Por los muertos, y porque aparezcan con vida los jóvenes de Ayotzinapa.
Rusvi Tahan
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