BREVES NOTAS EN VACACIONES I

Comentarios a Clarín en ¿ que leen los políticos en vacaciones?
Cuando uno sale de vacaciones tiene la oportunidad de ver otros espacios, otras gentes, otras realidades. También uno sale de vacaciones y asume una “actitud de vacaciones”. Yo tengo una actitud de vacaciones cuando voy a la playa. Podría resumirla en intentar disfrutar del mar y del sol, sin enloquecerme, llenarme de arena y cocinarme.
Esta actitud incluye asados permanentes, aprovechando la carne más tierna y barata que hay en las costas de Buenos Aires en relación a la que uno paga habitualmente en Patagonia.
Finalmente en vacaciones mi actitud incluye una actitud de “ político de vacaciones”, a que me refiero: tengo una compulsión a leer los diarios del día y seguir la suerte del país y el mundo al minuto, y meterme dentro de lo que los diarios dicen, que escriben, “ chinus dixit”, exclusivamente para que lo lean los políticos.
La verdad es que esta posición de político de vacaciones es reconfortante ya que me permite ver cuan pedestres son nuestros políticos vernáculos.
Esta primer nota esta dedicada a reflexionar sobre una nota típica del verano de Clarín, que cada verano se repite “ of course” : que leen los políticos en vacaciones. Detenerse a leer esta página nos sumerge en un mundo desopilante y a la vez cruel.
Me centrare en atender a señalar lo que leen centralmente dos políticos:
El primero que ha recibido los favores y las mieles de los diarios y las clases medias, hasta comprobar, cierto que a costa de nuestro país, que era francamente un salame. Si, sin dudar me refiero a Fernando de la Rúa.
¿Qué lee De la Rúa en vacaciones? La Biblia contesta, el libro que todo el mundo debe leer. Si nos hubiera dicho esto hace 10 años, seguro que zafábamos de votarlo y llevarlo a la presidencia. No porque la Biblia no deba leerse, sino porque si el la recomienda la devalúa. Y más si es tan hipócrita de recomendarla en vacaciones, donde uno quisiera leer un policial, una de amores o de sexo.
El segundo a quién quiero referirme es a un político muy afecto a salir en los medios y a decir siempre lo que la gente quiere oír. Este es Don Mario Das Neves, gobernador de Chubut, y precandidato lanzado primerísimo a presidente en el 2011. Se lanzó tan rápido como Menem cuando le llevo las flores a Isabelita en el 83.
¿Que lee Don Mario?. Lo primero y ahí nos da una pauta de su contracción al trabajo: el presupuesto provincial, francamente una pedorrez, solo se justifica en querer siempre decir lo políticamente correcto. Es decir: yo trabajo hasta en vacaciones.
Lo segundo, y sigue zanateando, a Maquiavelo, lo que lo pone en la franja de los Iluminati que siempre recurren al genial Florentino para ver como seguirán haciendo política. Y dar a entender que de eso entiende mucho, no de político de lleca sino por ser instruido. Casi, pareciera, se merece el famoso cartel , que los que no lo quieren bien pusieron, diciendo “ 80 % abogado 100 % pelotudo”
Finalmente y ahí si debe decir la verdad a Jorge Asis, lo que nos lo muestra más cercano a la realidad, lástima que lea a ese chancho menemista y un reconocido opositor a gobierno nacional, a quién ya poca gente presta atención, salvo que salga al estilo Carmen Barbieri a decir barbaridades para llamar la atención con un moñito al cuello y el aplauso de Mariano Grondona.
Había como 10 tipos más en la nota, pero esos leían lo que los diarios habían recomendado a los políticos, que deben saber algo de la historia reciente, es decir: “Operación traviata” u alguna que otra novela.
Rusvi Tahan