Reunión de Magnetto con Duhalde, Solá, De Narvaes y Macri. Gente a la que le interesa el país.
Así debería, grondonianamente, titularse la nota en La Nación y no como la tituló.
Cuando veía esa noticia por la TV, y me estaba indignando, mi compañera, acertada como siempre, me dice: pero está bien, es lo mejor esto, así cada uno sabe bien donde está el otro.
Y la verdad es que es cierto, a mi no me gustan tantas explicaciones como las que se han dado, que Magnetto es el titiritero, que los otros son obedientes, que era para ordenarlos como oposición, que era para limar asperezas, que era para mostrarle al mundo el poder de Magnetto.
Creo que hay un poco de todo, pero esencialmente, lo que hay es una derecha. Es decir un grupo con capitalistas, políticos, comunicadores y todos los intereses corporativos que quieran agregar que, al calor de sus vanidades, por imposibilidad de mostrar sus cartas reales, u otro factor, aún no han podido presentarse como una unidad. Pero lo harán, no lo duden. Esta gente y otros, a quienes, por demasiado impresentables o por ser de provincias periféricas (y aquí el mundo porteño bonaerense es determinante) quedaron afuera, como los Rodríguez Saa, Romero y Das Neves.
Es así que lo que la noticia nos muestra es solo parte de un juego mayor que va tomando color, que va mostrando sus cartas, que aun no logra hilvanar un discurso que conmueva a toda la sociedad que compra el discurso de orden y progreso. Cada uno muestra una parte de ese todo, todos comparten el todo. Que quiero decir: Duhalde defiende un perdón a los militares, critica el matrimonio igualitario y se junta con Bergoglio, Macri avanza con “los vecinos” aunque un poco desgajado y se junta vía Michetti, con Bergoglio, que lo provee de cuadros del Opus. De Narvaes personifica al patrón, lindo, con guita, eficiente y popular, Felipe Solá al chacarero que es laburador e “independiente”, Reutemann al tipo honesto y austero que toda derecha necesita. Y Magnetto el que venderá la imagen del ganador, eso sí, una vez que a) se pongan de acuerdo, b) se pongan con guita, presente o futura (bajo promesas contra Ley de Medios, no investigación de Ernestina, Papel Prensa, etc. etc.).
Esta gente se juntará, el único drama de la derecha, es que todos estos tienen el sello peronista, y eso le jode a un sector de la derecha de Doña Rosa que es de derecha pero radical, y allí van Cobos y Lilita a la cabeza. Si no fuera por ese pequeño desliz, que la derecha engendró en el 55. Si fueran un solo partido, serían quizás imbatibles. Pero la derecha no supo esperar con Irigoyen, no supo esperar con Perón, estaba tan acostumbrada a mandar que los quito del medio en su momento y engendro su propia división.
Pero bueno, como verá el campo popular, no el progresista que jugara seguro a favor de la derecha aunque diga que no, le quedan muchas cosas por hacer para llegar ordenado al 2011.
La derecha llegara con dos pollos: uno del Peronismo Federal y otro del radicalismo, aunque sea Alfonsín, ya que él será el mascarón de proa pero atrás vendrán los privatizadores, los curas, la anti Ley de Medios, los reducidores de la jubilación del 82, que ahora empujan pero dinamitarán cuando lleguen.
Esto es así porque: Magnetto, Roca, Nicholson, Bago, Ratazzi, etc. finalmente les enseñarán a los díscolos quien manda y quién es el mandado.
Rusvi Tahan
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