Hace 9 años

Un montón de muertos, aún se discute el número, y en general, como suele suceder, solo se cuentan los de los porteños. No cuentan los de Rosario por ejemplo.
No podía dejar pasar el tema, en especial porque en las últimas semanas ha habido otro montón de muertos, muchos menos, obvio, pero un montón. Y al igual que en aquella época, vale más Mariano Ferreyra ( que vale mucho, quién lo duda) que los Qom del Chaco. A estos les siguieron los de Villa Soldatti.
Hay similitudes y diferencias entre los dos momentos, diferencias el gobierno de De la Rúa empezó con sangre su mandato , a los dos días mando reprimir en el puente de Resistencia ( Chaco), la orden la dio el Freddy Storani, un ex joven alfonsinista.
Terminó igual ese mandato, increíblemente estúpido, con represión y muertes.
El gobierno actual hace gala del esfuerzo de no reprimir, esfuerzo doble, pues tiene, de un lado a los mastines de la policía babosos de rabia, y a muchos de los propios policias con los ojos henchidos en sangre, deseosos de morder, y del otro lado a pobres, militantes y también, por desgracia, a los mismos que organizaron la fiesta sangrienta de hace 9 años, a la cabeza, y sin sorna, Duhalde, el principal.
Para peor, sin ningún tipo de vergüenza, Duhalde prepara desde hace un montón un acto de lanzamiento a su candidatura presidencial testimonial, imposible, en Costa Salguero, es decir en la zona más top porteña, para que lo vean Mirtha y Susana, el mismo día que hace 9 años acicateo a sus mastines para armar quilombo, el mismo que intenta armar hoy.
Lo más importante, lectores, es intentar buscar quién gana y quién pierde en este juego, pues no nos engañemos, Duhalde sabe que no llega a presidente, ahora es solo una pieza más de la derecha capitalista, derecha que quiere volver a recuperar guita, que gana a paladas, pero que insaciablemente no le alcanza. Ese es el juego, no será Duhalde, pero ellos juegan al unísono para recuperar todo el poder, pues lo mucho que hoy tienen y que nadie les disputa, el de la guita, es insuficiente, necesitan recuperar el poder sobre las cabezas de la gente, que la gente vuelva a ver con buenos ojos la década del 90, al grupo Clarín y a los yanquis.
Eso quieren, a mi entender, haciendo una burdísima simplificación para ustedes.
El juego de las similitudes y las diferencias es notorio, y es tan sencillo de jugar, solo hace falta: estar un poco informado, revisar los archivos y tener memoria.
Rusvi Tahan