El contacto lo hizo un ex coordinador de la escuela de periodismo de El Hoyo.
Baje de mi coche y me metí caminado en la pista del Aeropuerto de El Bolsón, estaba muy nervioso.
Abdul me había dicho que aceptara ir, que, en esta instancia todo iba a estar tranqui, lo que me dejo dudas de futuras instancias.
El Helicóptero, modernísimo a mi parecer, estaba ya en la pista y Luis me saludo a un costado, haciéndome señas de que me acercara, me presentó al piloto y nos subimos a esa nave que se me aparecía como la del helicóptero de Jurasic Park.
Levantó vuelo suavemente y en breve tomamos altura, la verdad es que yo estaba medio embobado, veía el paisaje y no dejaba de maravillarme, enfiló sobre El Bolsón para Puelo, avanzamos acercándonos al Rio Quemquemtreu y fue enfilando hacia la confluencia con el Azul, de allí pude apreciar la maravilla que era la orilla noroeste del Azul, quien no quisiera vivir allí, pensé.
Luego empezamos a sobrevolar el Lago y enfilamos hacia el Turbio, el destino era el Esperanza, allí me esperaban unos señores importantes que querían charlar conmigo. No calcule el tiempo iba solo centrado en el paisaje, ya que la reunión la pase a una segunda ventanita de mi Window.
Llegamos, aterrizó como un pájaro, sin un sacudón, era un día espectacular ese 26 de abril, diáfano, sin viento, casi caluroso, si el sol te pegaba hasta primaveral, solo que el amarillo que nos rodeaba hacia perder mi vista y me recordaba que era otoño, me di vuelta como para dar un paneo general y allí vi la casa, bueno casa, era una mansión, enorme, me la imagine, mas chica, pero igual de cuidada que la de Lewis. Un tipo afuera me dio la mano y entramos.
Dentro estaban Duhalde, Terragno, el Intendente y un tipo que no conocía, yo daba la mano con rigidez, la verdad es que a esa altura estaba cagado. Korn, se presentó el tipo. ¡Glup! Pensé.
Terragno empezó a hablar despaciosamente, con esa voz y parsimonia tan particular, me invitó a tomar algo, acepte café y agua e, inmediatamente, cerraron los postigos y un Power se presentó a mis ojos. Era muy minucioso, primero un paneo aéreo sobre la Comarca Andina, luego empezaba a detenerse en lugares especiales, el autocad y el fotoshop permitían aparecer mansiones que a LLoyd Wright o Le Corbousiere los haría aparecer como novatos. Sobre el Puelo con muelles propios. Complejos comerciales. Caminos, la ruta a Chile que marcaba el famoso Paso Puelo.
Terragno detallaba una enorme cantidad de información estadística del futuro, del tráfico comercial, del turismo, de la conectividad, de los avances en infraestructura comunicacional, de las Universidades, todo tan perfecto, tan de ensueño que casi te quitaba el habla. Una nueva fundación, más exclusiva aún que Villa La Angostura, cercano más a Calafate pero con bosques. Unos alucinantes bosques.
Esto, siguió explicando, es el futuro, la oposición a este mega proyecto solo es entendible como un miedo al cambio, a cierto inmovilismo social.
Usted entenderá, apareció la voz de Korn, que esto tiene profundas bases legales, toda esta zona fue condenada, más que beneficiada por el Parque Nacional, corto el Lago en dos, separo el pueblo de Puelo de su destino, lo extrañó del lago. El Estado Nacional tiene derechos pero es un mal administrador, la gente, si tiene la tierra en propiedad, cuidará mejor de todo, de los incendios, de la basura. Una propiedad que le pertenezca es más eficiente ambientalmente que una que cuide el Estado, que ahora tiene plata, pero cuando no la tenga terminará abandonándola como otrora sin protección, y sin medios.
Yo, contrarió totalmente a mi histórica costumbre de getonear, opté por poner cara de póker y callar.
Bueno, luego de casi media hora más de explicaciones sesudas e Terragno, paró me miró y me dijo: usted y su ONG están equivocados, nosotros los entendemos, y sabemos de que tienen enormes preocupaciones ambientales, nosotros también y por ello impulsamos esto, queremos invitarlo a que preparen un curso de capacitación para pobladores, un informe y un mapa interactivo sobre los puntos a cuidar en el aspecto ambiental sostenible. No escatimaremos, y subrayo esta palabra, así que le presupuesto asignado a ustedes será generoso.
Yo a esa altura transpiraba, seguí callado, se hizo un silencio que se prolongó un rato. Exprese mis dudas, no me explayé sobre el proyecto y les aseguré la casi imposibilidad de aceptar el convite.
No me dejaron terminar, Terragno se levantó acercándose me dijo: no se apresure, piénselo, arme una reunión con su equipo completo para esta semana y nos reunimos.
No sé cómo, se me va el tiempo en la mente, pero ya me encontraba en la puerta del helicóptero cuando Duhalde, dandome la mano y reteniendola un poco, me dice, con una sonrisa y suavemente, usted entenderá que esto se va a hacer si o si.
Abdul y la puta que te parió pensé para mis adentros.
El helicóptero levanto vuelo y yo me ensimisme en mis pensamientos, mirando sin ver el Lago y el horizonte, cuando de pronto me apretaron el hombro y pegué un respingo.
Era mi mujer riendo, te quedaste dormido, dijo, viendo la tele en plena siesta.
Rusvi Tahan
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