El tío Mario y el Pajarito
Quisiera contar una anécdota personal, hace muchos años, mas de 40 en uno de mis viajes veraniegos a la chacra de mis abuelos, logré que mi padrino me ensillara un caballo, había muerto la Potota, yegua emblemática mansa y vaga, que era lo que yo siempre montaba y entonces prepararon el Pajarito, un caballo hermoso, altísimo, más para mi en aquella época. Yo lo monté y salí al paso, a campo abierto, fuimos así un trecho , de pronto se cruzó una liebre, luego me enteraría que mi padrino era afecto a cazar con ese caballo y el pobre había aprendido a correr liebres, el caballo salió disparado hacia adelante y yo lo único que podía hacer era no caerme. Luego de una breve, no para mí, pero violenta carrera, y justo a 1 metro del alambre que daba a un camino, se plantó en seco.
Yo agarrado de las crines y patas abrochadas por el miedo me la banqué, pero una vez detenido opté por bajarme y volver tranqui caminando con ese caballo mancarrón.
Lo curioso es que mis tíos desde lejos, según me contaron después, decían:- mirá que bien monta, mirá qué velocidad, mirá que boludo pensé yo mientras me contaban y yo les explicaba que en realidad se me había desbocado y no podía ni parar ni bajarme.
Cuento esta anécdota para graficar lo que para mi le está pasando al Gobernador del Chubut Don Mario Das Neves, el tío como le dicen aquí en la cordillera. Confiado, agrandado por una respetable gestión, se subió al caballo de la alta política y se le cruzó la liebre de la presidencia y ahí se desbocó el caballo. Claro muchos, como mis tíos, dicen: mirá que bien, mirá que audaz. Otros que viven bajo la sombra de su poder y prestigio, lo adulan mal, otros los más oscuros le dan máquina para armarse de un jinete para el desgaste. Un jinete cuyo destino, al igual que Buzzi, es ser un alfil de la derecha, pero que alfil al fin, no tiene destino.
No lo tiene porque como explico en notas anteriores, la derecha tiene mejores candidatos, y el peronismo de derecha, que es parecido a la derecha pero no es lo mismo, por razones que explicaré en otra nota, también.
No lo tiene además porque si fracasa Cristina Kirchner nadie votará a otra mujer, por razones quizás estúpidas, pero que mediáticamente se manejarán y se instalaran en el imaginario, y por lo mismo mucho menos votará otro sureño. Porteños dixit.
Por ello y pensando más que nada en sus coprovincianos del Chubut y la posible Masacesisación de su gobierno que los dejará a la intemperie, luego de endeudarse para hacerle el trabajo a la derecha, creyendo el canto de sirenas de sus sombras lo mejor es que pare el Pajarito y se vuelva al tranco para seguir gobernando bien a los chubutenses.
Rusvi Tahan
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